«Yo hoy libraba, me he despertado y he visto todos los Whatsapp de mis compañeras diciéndome que estaba la clínica cerrada y que habían cambiado la cerradura». «Después nos encontramos con que el dueño nos manda un mensaje diciendo que cerraban todas las clínicas temporalmente porque no hay dinero».

A pesar de ello, en la puerta de al menos una de las clínicas se ha encontrado un cartel fijado en el que se lee: «Nuestro personal está sufriendo insultos, vejaciones y estrés insoportable por lo que la dirección cierra el establecimiento temporalmente».

Los afectados por el cierre se pueden contar por miles. Arroyo comenta que «sólo nosotros teníamos casi 7.000 fichas de pacientes creadas», siendo la de Alcorcón sólo una de las nueve clínicas que tenía abiertas esta empresa, la mayoría situadas en el sur de la Comunidad de Madrid aunque con dos sedes en Sabadell y Mataró.

Inmaculada Sanz Pinilla es una de las afectadas. Ella comenzó su tratamiento el pasado mes de abril. Acudió a la clínica de Alcorcón por un problema de piorrea ya sin ocho piezas dentales. Le hicieron un presupuesto inicial de 18.000 euros que si decidía aceptar en menos de un mes descendería hasta los 12.700. «Había consultado en muchas franquicias y la verdad que era un precio muy bueno así que acepté. Pagué 5.500 euros en efectivo y el resto lo financié con la nómina de mi marido. A día de hoy no tengo dientes y me acabo de enterar del cierre de las clínicas. Ya no es por el dinero, es que no sé que hacer con mi boca. Es una sensación de impotencia total».

Otra de las pacientes es Laura Arroyo. Ella se iba a someter a un tratamiento de ortodoncia Invisalign en Fuenlabrada por algo más de 3.000. Pisó por primera vez la clínica en el mes de mayo, siete meses después sólo la han sacado dos muelas y hecho dos empastes. Ni rastro de la ortodoncia.

Esta mujer de 26 años dice no saber qué va a ocurrir con el dinero que le deben«por todo lo que no me han hecho», aunque confiesa «por suerte» no tener prisa en que se lo reintegren «siempre que lo hagan». Como ella, muchos pacientes de Funnydent están confusos ante la situación y han decidido unirse  para organizarse a la hora de denunciar y darse apoyo unos a otros.

Otra de las acciones que se está repitiendo es la convocatoria de protestas frente a las clínicas cerradas. En Leganés, Alcalá de Henares o Sabadell ya están teniendo lugar esta misma tarde. En otras localidades, como Fuenlabrada, han optado por reunirse este viernes para acudir conjuntamente a la Oficina Municipal de Información al Consumidor.

Los trabajadores llevan meses sin cobrar

Mientras tanto, los trabajadores de las clínicas también se están viendo afectados por el cierre. Álvaro Navajas, cirujano en Alcorcón, cuenta que tenían problemas con los pagos desde el pasado noviembre. «A mí de los últimos tres meses sólo me han ingresado 500 euros, me deben unos 3.700». «El dueño nos ha dicho que, si puede, nos pagará enero pero que el resto lo reclamemos en los juzgados. Ya nos estamos agrupando para poner denuncias conjuntas».

Además de las denuncias de las últimas horas, Cristóbal López, el propietario, ya acumulaba varios requerimientos de ex empleados por despidos improcedentes. Hace tan sólo un mes, un grupo de 7 u 8 trabajadores (entre auxiliares, recepcionistas y doctores) fue echado tras reenviar un email al resto en el que López les prometía que antes de una fecha les habría pagado, algo que no había ocurrido.

Hasta el momento, la empresa no ha emitido ningún comunicado oficial a través de su página web.